[vc_row css=”.vc_custom_1446498795175{margin-top: 75px !important;}”][vc_column][ultimate_heading main_heading=”Grupos focales para la nueva normalidad” main_heading_color=”#58595d” alignment=”left” main_heading_font_size=”desktop:30px;mobile:30px;” main_heading_margin=”margin-bottom:30px;” main_heading_font_family=”font_family:Merriweather|font_call:Merriweather|variant:700″ main_heading_style=”font-weight:700;”][/ultimate_heading][vc_row_inner][vc_column_inner width=”2/3″][vc_column_text]En la investigación cualitativa de mercados los grupos focales son una de las herramientas más comunes para conocer las percepciones de los consumidores. Han sido utilizados por marcas, agencias de publicidad o consultores de comunicación para obtener información de valor sobre el tópico que se desea abordar. Tradicionalmente se han hecho de forma presencial, pero la nueva normalidad plantea el reto de hacerlos de forma virtual.[/vc_column_text][vc_single_image image=”9307″ img_size=”75×75″ add_caption=”yes” style=”vc_box_circle” css=”.vc_custom_1619744006982{margin-top: 25px !important;margin-bottom: 5px !important;border-top-width: 0px !important;border-bottom-width: 0px !important;}”][vc_column_text css=”.vc_custom_1619803373646{border-bottom-width: 20px !important;}”]

Escrito por: Rubén Mejía

[/vc_column_text][vc_separator css=”.vc_custom_1618948662259{margin-bottom: 40px !important;}”][vc_single_image image=”9443″ img_size=”full” alignment=”center” css=”.vc_custom_1619744115731{margin-bottom: 15px !important;}”][vc_column_text] Un grupo focal exitoso es la suma de diferentes elementos que manejados de la forma correcta nos permitirá obtener la información deseada. Aunque esto sigue siendo válido para la experiencia virtual, hay cambios que es indispensable implementar porque, aunque la metodología es la misma, la herramienta utilizada para implementarla es diferente. Apenas estamos empezando a descubrir virtudes y limitaciones de las reuniones virtuales.

Para tener un grupo focal exitoso es recomendable:

La moderación requiere un esfuerzo mayor que en una sesión presencial, pues resulta clave mantener la atención de los participantes, regular adecuadamente las intervenciones de manera que la participación sea equilibrada, profundizar en los temas sin afectar el tiempo de duración de la sesión y redoblar la concentración para que no se escape información de valor. Se dice fácil, pero es un reto complejo que requiere experiencia.[/vc_column_text][vc_column_text css=”.vc_custom_1619744508256{margin-bottom: 30px !important;}”][/vc_column_text][vc_column_text][ssba][/vc_column_text][/vc_column_inner][vc_column_inner width=”1/3″][vc_wp_categories][vc_wp_posts number=”5″][/vc_column_inner][/vc_row_inner][/vc_column][/vc_row]